Luis José está en Seúl, pero no se alegren por ello ya que regresará en breve.
Y desde allí me ha dado un motivo para escribir una vez más sobre él. Y les puedo prometer y prometo que quiero dejarlo, pero es imposible. Hoy me he sorprendido con la noticia de que Luis José Zapatero Rodríguez (es que con la nueva ley se ha cambiado el orden) ha salido a correr por Seúl con el Primer Ministro inglés, Cameron, antes de acudir a la cumbre del G-20.
Ahí tienen la foto.
Observen el estilo impecable de Luis José, vestido, sorprendentemente, con colores patrios y mallas de corte gótico, rictus de cansancio y sobre todo, ese dedito extendido, señal inequívoca de que a la vez que corre va, probablemente, hablando (prueba de que sí puede hacer dos cosas a la vez, para que luego digan de él).
Parece que va diciendo: “ansia infinita de paz, cambio del clima climático, brotes verdes, Obamita te echo de menos, España va bien, un millón de parados más ... digo de puestos de trabajo más, me voy a Afganistán que viene el Papa, ya he vuelto de Afganistán para despedir al Papa, soy rojo y feminista, no me levanto cuando pasa la bandera esa de las barras y estrellas, a la que perdió con Gómez la llamaban Trinidad , vamos a ... (censurado) a Rusia, vivan Evo y Hugo, me gusta la moda gótica, mañana voy a invitar a éste a ver Bambi juntos...”
Y los otros tres , ¿corren con él o huyen despavoridos al verlo llegar? Miren la cara de Cameron y la de su guardaespaldas (el de negro). La cara del guardaespaldas de Luis José es la de un hombre resignado a su suerte, impasible el ademán.
Viendo la foto confirmo una cosa que siempre me ha llamado la atención en Luis José: Jamás despega los bracitos del cuerpo. Obsérvenlo cuando habla en los mítines. Desde el hombro al codo, todo se le pega al cuerpo, separando solamente la parte que va desde el codo a la mano de forma tal que parece un pollo agitando las alas.
Correr es lo suyo. Ya escribí en un artículo que Luis José era como Forrest Gump. Ya saben, ese personaje medio bobo de solemnidad que por casualidades de la vida llega a lo más alto. Ahora ya tiene otra coincidencia, recuerden aquello de “Corre Forrest, corre”. Pues eso, corre Luis José, corre por el Forest Park de Seúl!!!
Pero no seamos tan malos malísimos y creamos que Luis José está corriendo por el parque, no. Lo más seguro es que esté celebrando una cumbre bilateral con Cameron, en la que le cante las cuarenta y le diga al inglés aquello de “Malvinas Argentinas, Gibraltar...inglés”.